Su vegetación es la propia de las zonas litorales volcánicas: plantas de pequeño y mediano porte, adaptadas a vivir en un medio agreste. Este medio se caracteriza por sus bajas precipitaciones, sus temperaturas medias superiores a los 18ºC y su alta salinidad, debido al spray marino o maresía (pequeñas gotas de agua salada arrastradas por el viento). Encontramos unas 60 especies de plantas de las cuales la mitad son endémicas de Canarias o de la isla, tales como aulaga, tabaiba amarga y de tolda, verode y magarza.
La fauna terrestre es discreta a la par que valiosa. Son representativos desde los innumerables insectos hasta los reptiles, como el abundante y segundo mayor lagarto del mundo: el lagarto gigante de Gran Canaria (Gallotia stehlinii); o la pequeña lisa grancanaria (Chalcides sexlineatus), ambas especies endémicas de la isla.
La fauna terrestre es discreta a la par que valiosa. Son representativos desde los innumerables insectos hasta los reptiles, como el abundante y segundo mayor lagarto del mundo: el lagarto gigante de Gran Canaria (Gallotia stehlinii); o la pequeña lisa grancanaria (Chalcides sexlineatus), ambas especies endémicas de la isla.
La gran riqueza de fauna y flora, los fondos de maërl formados por las algas calcáreas conocidas como confite, Lithothamnion corallinoides y Phymatolithon calcareum y sus cuevas submarinas son muestra de la variedad de ambientes de los fondos marinos del Confital. La fauna es muy diversa, desde grupos de calderones grises (Grampus griseus), delfines mulares (Tursiops truncatus) hasta cachalotes (Physeter macrocephalus). Así como pulpos, rascacios, tamboriles, chuchos y ejemplares de tortuga boba (Caretta caretta), que utilizan el área como zona de alimentación y descanso.